Nuestra visita a Jerez de la Frontera fue con un objetivo muy específico: familiarizarnos con el proceso de producción del jerez (y degustarlo, naturamente). Mis conocimientos acerca del Jerez eran casi inexistentes y tenía una mala experiencia previa habiendo probado un jerez económico argentino. Pero bastó que comenzara a navegar un poco por internet para darme cuenta que se trataba de un mundo aún más exquisito y complejo que el del vino fino.
El destino elegido fue la famosa e internacional Bodega Gonzalez Byass, elaboradora del aún más famoso Jerez Tío Pepe
Esperamos la llegada de nuestro guía y el comienzo de la visita entre barriles firmados por personalidades destacadas (Picasso, Fangio, Senna, Spielberg, Serrat, etc). Luego comenzamos la recorrida en una especie de carrito de golf, y se nos explicó la elaboración de Brandy y de un sofisticado whisky llamado Nomad.
Como nota simpática nos contaron la historia (con fotos) de ratones que subían escaleritas para tomar jerez y finalmente proyectaron un documental con la historia de esta empresa familiar. Luego de tan agradable prolegómeno pasamos a la degustación correspondiente a la Visita Sherry Fusion (una de las más accesibles, las de brandy eran mucho más caras.
El orden de los jereces, de más seco a más dulce fueron:
Croft Original Sherry (fue una de las tres botellas que posteriormente compramos y el más exitoso entre nuestras amistades)
Tío Pepe Palomino Fino
Había varios platitos con comida para maridar, pero quedé enamorado (gastronómicamente) de las Patatas Alioli. La cocina más sencilla puede ser exquisita cuando está bien realizada.
Terminamos en la tienda, comprando jerez, vinagre de jerez, sombreritos Tío Pepe para tapar botellas... creo que estaba tan feliz de la experiencia que hubiera comprado más cosas si hubiese podido.
Luego nos alojamos en La Línea de la Concepción, porque el alojamiento era más barato que en la propia Gibraltar.
Caminamos por la Main Street que es una especie de Free Shop peatonal al aire libre. Nos dio la impresión que la mayor parte de los empleados eran españoles y que también muchos niños y adolescentes españoles iban a estudiar allí.
Aunque no lo puedan creer tuvimos que preguntar en un negocio:¿dónde está el peñón? Nos miraron como si los estuviésemos cargando. En silencio señalaron a nuestras espalda. Allí se hallaba una de las columnas de Hércules (Peñón de Gibraltar) -la otra está en África)
Para subir al que tomar un teleférico. Al llegar a la última estación, hay un local de merchandising y una vista panorámica muy bonita. Pero lo que tal vez llame más la atención es la mona de Gibraltar. Hay muchísimas (aunque leí que expulsaron algunas por ser agresivas); no se las puede alimentar, a riesgo de que te cobren una multa muy alta en libras esterlinas.
( TODAS LAS FOTOS HAN SIDO TOMADASDEMICUENTA DE INSTAGRAM @elviajeroinvernal )
No hay comentarios:
Publicar un comentario