Se dice que hay más de setenta palabras en gallego que describen diferentes tipos de lluvia (algunos se atreven a decir que son más de cien).
Comenzamos nuestra recorrida -bajo la lluvia, apropiadamente- por el Parque de la Alameda, donde se encuentra ubicado "La Perona", el pino que Evita plantó en 1947 y goza de perfecta salud.
Llegamos luego a la Praza do Obradoiro, donde advertimos que el célebre Pórtico de la Gloria se encontraba en restauración (son cosas que pasan; a respirar profundo, contar hasta diez y al próximo atractivo).
También pudimos ver el Pazo de Raxoi, la Universidade de Santiago de Compostela, el Hostal dos Reis Católicos, entramos a la propia Catedral (e hicimos una excursión por sus techos, donde la guía nos contó que ese mismo día se estrenaba la miniserie "El Final del Camino" -la cual vimos religiosamente mientras permanecimos en la penísula-).
En la Praza Quintana de Vivos vimos la Placa al Batallón Literario ("Por rescatar a Fernando, y acabar con Bonaparte, unióse Minerva a Marte"). Era 1808 y frente a la invasión francesa los estudiantes fueron al campo de batalla, pero para que Juan Ignacio de Armada Caamaño Ibáñez de Mondragón y Salgado de Sotomayor, marqués de Santa Cruz de Rivadulla los pudiera mandar le otorgaron doctorados de todas las facultades :-)
Visitamos también el Museo de la Catedral y dos botafumeiros en la biblioteca (la réplica en plata y el original en latón). En realidad, al verdadero lo sustrajeron en época napoleónica, junto con muchos otros objetos de metales preciosos. El botafumeiro se puede ver en funcionamiento en la Catedral en ciertas fechas litúrgicas, en alguna misa por acuerdo especial de algunas instituciones o pagándolo un grupo de turistas.
Visitamos asimismo el Museo de las Peregrinaciones y el Museo do Povo Galego donde se encontraba la Dorna do Grove "Rosa"; mi abuela Rosa llegó a Buenos Aires en la década del '20 y empezó a trabajar como niñera. Había dejado en Portonovo a su familia; muchos hermanos menores. Juntó dinero, volvió y le compró el barquito a mi bisabuelo, quien le puso su nombre (que es también el de mi madre). Cuando mis padres volvieron al pueblo en los noventa, les contaron que estaba en la sala dedicada a las actividades marineras del Museo do Pobo Galego.
En el Panteón de Galegos Ilustres ilustres presentamos nuestros respetos a Castelao y a Rosalía de Castro, pionera del Rexurdimento con versos como:
En el Panteón de Galegos Ilustres ilustres presentamos nuestros respetos a Castelao y a Rosalía de Castro, pionera del Rexurdimento con versos como:
«Has de cantar,
meniña gaiteira,
has de cantar,
Comimos unas Tartas de Santiago mientras caminabamos por las callejuelas milenarias y cenamos en una cafetería llamada Las Vegas; disfrutamos raxo y bacalao.
Creo que nunca pensé que se podrían hacer tantas cosas con el cerdo; infinitas clases de embutidos, chorizos, recetas de todo tipo con el lomo y todo lo que se les pueda ocurrir.
El jueves 12 partimos hacia la Costa da Morte. El nombre no es gratuito; es completamente ilustrativo. Y de ello pueden dar cuenta una enorme cantidad de barcos naufragados y de marineros muertos.
A lo largo de ella hay infinidad de poblados pesqueros, antiguos y bellísimos.
En A Coruña visitamos la Torre de Hércules. Me impresionó por su historia, por su antigüedad. Pero también por su temprana y adecuada conservación.
Ascender por esa escalera es una experiencia inenarrable. Y al alcanzar su cúspide la emoción es inefable.
Teníamos reservada en Madrid una prolongada excursión en Segway, que jamás habíamos utilizado.
Al bajar de la torre un muchacho muy amable y paciente se ofreció a enseñarnos a usarlo y los alquilamos media hora; fuimos hasta los menhires (que son un conjunto escultórico; no son auténticos).
Almorzamos en Camariñas (y en mi cabeza sonaba "Ao pasar por Camariñas, por Camariñas, cantando, as nenas de Camariñas quedan no río lavando. Camariñas, Camariñas xa me vas camariñando, por unha de Camariñas vino no mundo penando" -recomiendo versión de Rosa Cedrón y Luar na Lubre-) tortilla, empanada gallega y queso de tetilla.
Vimos el Parque Eólico do Vilán (respecto al aprovechamiento energético español -y a la infraestructura en general- chapeau, hay que sacarse el sombrero) y también el Faro Vilán,
¿Dónde termina el Camino de Santiago? Algunos dicen que en Muxia y otros en el finis terrae Fisterra (oportunidad para conseguir la Muxiana y la Fisterrana si no se logró antes la Compostela) donde hay un faro y el busto del General Don José de San Martín.
La imagen de los barcos en el puerto de Muxía quedará para siempre en mi memoria.
El viernes 13 desayunamos en 25 de Julio. Vimos las reliquias del Apóstol Santiago; lo abrazamos, cual es la tradición. Nos despedimos con El Monasterio de San Martín Pinario y las deliciosas galletitas de las monjas en el Monasterio de San Pelayo de Antealtares.
(TODAS LAS FOTOS HAN SIDO TOMADAS DE MI CUENTA DE INSTAGRAM @elviajeroinvernal)
No hay comentarios:
Publicar un comentario